Nuestra Historia
La semilla de este proyecto comenzó con el nacimiento de nuestra primera hija, Ayla, que ahora tiene 6 años. Los dos pensamos que el ser humano ha desarrollado una forma de vida desequilibrada y que genera desequilibrio a su alrededor y nos empezamos a plantear como queríamos traer a una nueva personita a este planeta.
La búsqueda de otras opciones de crianza y de educación nos llevó a interesarnos por pedagogías y formas de crianza alternativas, más respetuosas con el desarrollo personal y el entorno.
Cuando nos pusimos manos a la obra vimos que destacaban 3 líneas de trabajo: calendarios cíclicos, mobiliario y figuras de lana afieltrada. En todo momento pensamos en el mundo online, para llegar al máximo de gente y también poder trabajar donde prefiramos vivir, algo básico en nuestra forma de entender la vida y la crianza. Ambos nos hemos criado en plena naturaleza y para nosotros es muy importante desarrollar nuestra vida y crianza cerca de ella.
Nuestra hija asiste a una escuela de crecimiento respetuoso, que fomenta estos mismos valores y que nos permite aprender mucho y convivir de forma cooperativa con gente activa y preciosa.
Seguimos aprendiendo cada día para mejorar en este proyecto, que se cimenta sobre unos valores muy profundos en nosotros y nos permite compaginar nuestras habilidades personales.
Lucía Hikari
Nací y crecí en Pitres, en el corazón de la Alpujarra granaína, pasando toda mi infancia viviendo en el campo, inmersa en la naturaleza, en sus ciclos y con sus bondades y dificultades. Crecí rodeada de personas que buscaban nuevas formas de vida y procuraban trabajar en lo que les hacía felices. Siempre tuve claro que quería ser madre.
Desde pequeña probé diferentes disciplinas artísticas, alimentando el trabajo creativo y de expresión artística. Con 16 años comencé a estudiar danza y desde entonces me he dedicado a ella, con mi escuela Hikari Danza, especializada en Mujer y Danza Tribal. Paralelamente, durante unos años desarrollé un proyecto de costura de vestuario para danza, en el que aprendí a manejar diferentes textiles y crear con ellos.
Tengo estudios universitarios en Educación Social y Danza-Movimiento-Terapia. Especializándome en el ámbito de la mujer y lo relacionado con su ciclicidad. También he hecho varias formaciones en Educación Ambiental. Todo ello crea la suma de la motivación e inquietud por todo lo que refleja Criaturas de la Tierra.
Álvaro
Nací y crecí en Órgiva, falda de la Alpujarra. Pasé toda mi infancia y parte de mi juventud en gran contacto con la naturaleza, viviendo en el campo, trabajándolo y conociendo sus tiempos y los recursos que ofrece.
Desde muy joven comencé a interesarme por la música y descubrí mi habilidad para expresarme a través de mis manos. Esto me llevó a aprender percusión y formar parte de varios grupos, hasta la actualidad.
Poco después empecé a estudiar en Artes y Oficios, carpintería, talla en madera y restauración de muebles antiguos. Compaginando estas dos actividades con mi gusto y pasión por los animales, plantas y árboles.
Después de diferentes trabajos, decidí crear mi propio taller como ‘El Gato de Palo’ y posteriormente crear junto con mi pareja nuestro último proyecto, ‘Criaturas de la Tierra’. Este surgió gracias a la inspiración que nos brindó nuestra hija y que ahora mismo es nuestra gran apuesta.